Que recuerdos me trae este camino, mi primera vez haciendo un largo recorrido en bicicleta de montaña con alforjas, seguro que más de uno estará pensando..Algún día  realizare esta pequeña aventura. Para aquellos que estén  indecisos pueden leer las crónicas que día a día nuestro compañero Javi junto a Ignacio del Tebike nos relatan de cada etapa.Les agradezco este gran esfuerzo ya que es muy complicado terminar con tantos kilómetros a veces muy duros  y casi sin tiempo para descansar, comer y preparar todo para el día siguiente, tener que estar escribiéndonos.   

Llegada

Al aterrizar en Pamplona cogimos una guagua que nos lleva hacia Roncesvalles donde iniciaremos la primera etapa, no dejo de pensar mientras miro por la ventana por donde pasaremos al regreso por esta ciudad pero esta vez en bicicleta, que locura ir hacia atrás para volver hacia el mismo punto en la primera etapa. Una vez en Roncesvalles buscamos un sitio donde dormir, esta todo lleno y nos asignan un barracón de obra donde dormiremos 8 personas, llueve mucho y me da la sensación de que nuestra primera  noche será muy dura.

Primera Etapa Roncesvalles- Lorca

Domingo día 15, nos levantamos muy temprano y ciertamente dormimos muy mal, ronquidos por un lado, otros que se levantan y hacen mas escandalera que un elefante en una cacharrería (Espero que no sea lo habitual).

Ilusionados arrancamos nuestro primer día bajo la intensa lluvia,  como podíamos pedaleábamos e intentábamos disfrutar aunque era casi imposible, no podiamos sacar fotos ni video así que todo para  adelante. A los dos kilómetros si ya no era suficiente con la climatología tenemos un problema mecánico, el cambiador se nos desplaza demasiado hacia la llanta, parada obligatoria. Después del breve arreglo continuamos, pero no duramos mucho, a 5 km pinchamos, parece que el Santiago Apostol nos pone las cosas difíciles.

A medio día cambia el tiempo y sale el sol, ¡Alegria! , nos quitamos la ropa de lluvia y empezamos a disfrutar, senderos, caminos y paisajes espectaculares, uno de los que me dejo sin palabras fué la subida al monte del Perdón  con unas vistas increibles pero con una bajada muy dura por la pista tan llena de rocas.En nuestra primera parada donde debíamos hacer noche no encontramos albergues libres (Teníamos que reservar, estamos en temporada alta), viendo las pintas que teníamos nos hacen un favor y nos llaman a un albergue en Lorca reservándonos dos plazas.

De nuevo sobre nuestras monturas continuamos el viaje a Lorca y como no hay dos sin tres nos equivocamos de camino, las piernas empiezan a fallar y los calambres aparecen pero llegamos a nuestro albergue con 92 km, muchos mas de los pensados para el dia de hoy.