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Crónica del IronBike 2012, por David y Loreto
Al Iron Bike en Los Alpes Italianos ( nota del admin: seguramente la más dura de las pruebas por etapas en BTT. De los 108 participantes, sólo 62 han terminado la prueba ) nos apuntamos de forma compulsiva en el mes de Noviembre animados por el precio de sus inscripciones y por el alto porcentaje de reto personal, capacidad de sufrimiento y factor aventura que hacían que la prueba fuera algo más que una carrera de MTB por etapas, ¡y vaya que si fue algo más!.
Nunca me había enfrentado a una prueba tan dura únicamente en bicicleta de montaña y tras la Ultrabike de La Palma llegué a dos conclusiones debía cambiar de bici y tenía que empezar a entrenar en serio. Lo primero lo cumplí y 3 semanas antes del Iron tenía mi bici nueva, demasiado tarde, ya lo sé, y lo de entrenar lo lleve peor el hecho de solo coger la bici me superaba y encima por medio el campeonato de España de Raids.
Bastante asustado por los videos y crónicas que había visto, con algunos consejos de Moi y con la sensación de que todo esto me iba a superar tomamos rumbo a Italia.
Que cansados tenía las piernas cuando comenzó el prólogo una lluviosa tarde en Limone. 15 minutejos de nada que servían solo para aflorar los nervios de la peña. Yo me lo tome como lo que era un escaparate frente al pueblo y me lo intenté pasar bien serpenteando entre las estrechas callejuelas del pueblo y así me fue, el puesto 88 en la clasificación, pero no significaba nada.
ETAPA 1º
LIMONE - SAN DAMIANO
137Km Desnivel: 4700m Tiempo:10:15h Posición: 19
Tras una lluviosa noche amaneció de la misma forma y por delante bajo la lluvia la etapa más larga en Kilómetros de la prueba. Las primera tres horas lloviendo y tras estas el primer gran gigante, el Valscura, a superar 1800 metros de desnivel, que nos hizo saber de que iba esto del Iron Bike, imagen inolvidable el último tramo zigzagueante con todos con la bici a cuesta, cosa que se hizo habitual, y luego tras coronar, senderos de descenso de infarto, donde empecé a descubrir una faceta nueva en mí de trialerista. Por el camino ruedo con Dani un chico de Zaragoza con el que finalizó la etapa.
Los avituallamientos espectaculares, de hecho en la prueba no hice uso de la comida deportiva que había traído.
Al finalizar montaje de tiendas y lavado de bici en el campo de fútbol del pueblo, vamos lo que va a ser el día a día durante la semana, y es cuando la organización me da una fatal noticia Loreto está en el hospital a sufrido un fuerte esguince cuando porteaba la bici por zonas pedregosas que le obliga a abandonar y pienso ¡ay mi madre que vamos a tener que volver al Iron el próximo año para que lo acabe! Loreto regreso por la noche lógicamente desilusionada ya que de ser participante pasaba a ser mi asistencia pero de está retirada obligada siempre le quisimos sacar el lado positivo ya que gracias a ella pude más adelante reemplaza mi bici por la suya.
ETAPA 2º
SAN DAMIANO – BARGE
110Km Desnivel: 4500m Tiempo: 9:00h Posición: 13
De esta etapa destaca la subida al monte Belino con un desnivel a superar de 2200 metros y la cima de 3100 de altura por la que se rueda entre senderos nevados, y con un frío que apretaba. Aquí descubro que en los grandes puertos es donde más me abstraigo y disfruto, ¡es increíble estar aquí!, pienso.El truco ya se lo voy cogiendo, cuando veo un pico delante pensar ¡bueno no pasa nada hay que subir por ahí! Y a medida que se sube pensar ¡no creo que la subida acabe ahí seguro que hay algo más por detrás!, y con esa mentalidad uno está a salvo de llevarse algún susto por la dureza del recorrido, por que ya os digo en esta prueba se sube un puerto de cuidado para poder ver el siguiente puerto rompedor que vas a tener que subir.
Una vez coronado y a una temperatura de 3º, iniciamos un descenso por una de las trialeras más ciclables y espectaculares de la prueba.
ETAPA 3º
BARGE – TORRE PELLICE
97 Km. Desnivel: 5000m Tiempo: 9:30h Posición: 14
Salí bastante animado, ya la mentalidad me había cambiado y cada vez que veía delante un pico tenía asimilado que lo iba a subir y me lo iba a pasar bien haciéndolo.
La etapa arranca con una especial, haciendo un bucle que llega otra vez a Barge. Una subida de 900 m de altitud, que baja por una trialera espectacular, rápida y técnica que hice veloz y pase por el avituallamiento sin pararme y con los fuertes ánimos de Loreto. Después de la especial, salgo a mi ritmo, mientras la gente manduca sin parar. Eso me permite ver como los primeros se van tentando y ruedo con ellos el tramo de enlace a tope, todo un lujo. Subo un par de picos pequeños y en la ultima trialera que bajaba hacía el comienzo del puertaco de la etapa, un gran ruido me saco de mi motivado estado, la pata del cambio se había partido lo que había provocado la rotura del cambiador y la cadena. Tras 3 kilómetros corriendo con la bici a cuestas llegué al avituallamiento y el puesto mecánico, pero la cosa no tiene solución y tras caérseme el mundo encima y una hora y media más tarde acabo con la increíble Giant de Lore semi adaptada a mi medida, la pega es la tija que está por encima del tope y aún me faltaría un pelín.
Con una calentura de cuidado comencé a subir el Chiot Cavallo 2º especial y puertazo del día con un desnivel de 1800 metros con su consiguiente porteo y loco descenso, uno de los puertos más duros de la prueba en el que marque el 9º mejor tiempo, debido al mosqueo por romper la bici, entrando a meta en un muy buen puesto.
ETAPA 4º
TORRE PELLICE – PRAMOLLO
100 Km. Desnivel: 5000m Tiempo: 10:30 h Posición: 16
La etapa se alargó más de lo previsto, después del aperitivo de 900 m. afrontamos la subida al Colle Cialancia, 2689, con un desnivel a superar de 2100 metros, y durísimas rampas a superar con la bici a cuestas. Apenas 15 personas entramos dentro del tiempo límite de 12 horas por lo que dieron mas tiempo, permitiendo a muchos corredores no ser penalizados, cosas del Iron y su particular sistema, cosa que a mí me pareció injusta sobretodo para los que tuvieron que apretar fuerte para llegar a tiempo con el desgaste consiguiente. Las últimas dos horas se me hicieron interminables, donde cada uno hace lo que puede, terminar de bajar, subir 900 metros más y bajar por un sendero retorcido y técnico, que no pierde altura, que se complica, que vuelve a subir y con el tiempo pasando. Llegada en subida, por suerte yo iba sobrado de tiempo, espectacular la llegada con toda la gente retirada y duchada aplaudiendo.
Esa noche recurrí a los mecánicos para el cambio de pastillas, 3 días me duraron las anteriores.
ETAPA 5º
PRAMOLLO – REFUGIO SELLERIES
80 Km. Desnivel: 3700 m Tiempo: 6:30h Posición: 20
La organización tras la escabechina del día anterior acortan la prueba 10 kilómetros y 400 metros de desnivel menos, yupiiiii. Sobre el road-book, parece una etapa sencilla. La organización teme una debacle y nos da un respiro; nos parece más llevadera, pero son 3700 de altitud y unos 80Km.… Retomamos la ruta por donde acabamos ayer, hasta llegar a la entrada de la mina de talco con el frontal como iluminación., una especial de dos Km. entre los raíles de las vagonetas que te podían jugar una mala pasada y mandarte al suelo, como le ocurrió a mi compi Dani el maño luxándose el hombro , Parece mentira como se pueden cargar los brazos para no pisar el hierro resbaladizo y la tensión de la oscuridad…
Ya salimos al exterior y seguimos en marcha, otro puerto de 1400 m, bajada y un tramo de carretera donde empezamos a ver el impresionante fuerte de Fenestrelle, una sucesión de fortificaciones que crestean hasta lo alto de la montaña, primera subida fácil, hasta introducirnos en la ciudad fortificada; impresiona rodar por tanta historia hasta entrar en la zona fortificada. Subimos por una pista con mucha pendiente, y a las alturas en las que estamos, aún lo puedo subir a pedales ¡Genial!, pienso.
Al final salimos a una pista que sube hasta el refugio de Selleries, que se hace pesada, larga y pestosa, hago grupeta con Javi, un catalán con el que rodaría a menudo en las siguientes etapa. Llegamos al refugio sobre las 14:00 h, y descubrimos donde vamos a pasar la noche, a 2000 m. de altura, en medio de un circo alpino y con unas vistas estupendas…puro Iron.
Esta etapa la hice muy animado debido a que el desnivel y el kilometraje era inferior, pero al Refugio de Selleries llegue destrozado, el cansancio ya era notable.
Un bañito en bolas en un lago helado hizo que, además de darle el espectáculo al resto de corredores, asistencias y organización, las piernas me revivieran.
ETAPA 6º
REF. SELLERIES – SESTRIERE
90Km Desnivel: 3800 m Tiempo: 10h Posición: 20
Penúltima etapa. El comienzo se me hizo duro y monótono. Muchos de los corredores se tomaron fiesta el día de ayer, con tal de hacer esta etapa, una de las míticas del Iron ya que se sube al Monte Chaberton. Antes, otra especial llena de historia, la bajada de 4000 escalones (si, 4000, no se me ha escapado ningún cero) del fuerte de Fenestrelle. Impresionante locura por túneles y pasadizos sin iluminar, tramos al aire y partes técnicas donde disfruté como un enano, 12 minutos de infarto. Vale la pena ver el video, todo, no tiene desperdicio.
Después de la especial de las escaleras, paro un momento en el primer refreshiment del día; en ese punto unos cuantos enfadados se han equivocado en una cinta y han bajado por pista, en lugar de hacer la especial, esperan que la organización los vuelva a subir…
Para una prueba tan larga, parece mentira los escasos errores de marcaje; las marcas se hacen con cintas azules en señales y ramas y con el símbolo IB pintado con spray rojo en el asfalto y en piedras, a veces encima del anterior de otras ediciones. Salvo excepciones, si no ves una marca, tendrás otra mas adelante. Así que si te pierdes, suele ser por cabezonería o porque vas demasiado deprisa; ante la duda, para arriba, siempre…hasta encontrar la siguiente marca. Angustia no ver la marca, sobretodo cuando vas bajando, y sueltas el freno con mucha satisfacción cuando ves que no te has equivocado…
Sigo la ruta mas feliz que una perdiz; he disfrutado la especial, aunque me he pegado una leche de cuidado en las escaleras que me hizo darme cuenta de un golpe de mis limitaciones, no he perdido mucho tiempo, y sigo las marcas…Y me encuentro con otra de las constantes del Iron, los perfiles…Una de las tareas antes de dormir, en la soledad de la tienda y con el frontal, es la de revisar los perfiles. Yo opte por pegar el perfil diario en el cuadro de la bici cosa que me servía de gran ayuda. Como las hojas que se van cayendo del calendario voy sacando cada noche una a una del libro de ruta; se rueda mucho mas a gusto teniendo la referencia de la altura y kilómetros que te faltan.
Aunque es solo una referencia ya que donde se ve una suave pendiente de 600 m. de altitud en 20 Km., por lo que podrías esperar un idílico y tranquilo paseo hasta un remonte en Sestriere, en realidad es un sube y baja de una pista, sendero que va por la ladera de una montaña, con tramos de pateo, rampones y bajadas que van limando las fuerzas escasas…Busco buen ritmo y voy abriendo carrera, el Chaberton y sus 2000 de altitud acumulada me dan pánico y no quiero perder ni un minuto.
Por suerte parte de las subidas se superaban con telesillas que te hacían evadirte de la prueba y sentirte como un turista, que chulo subir sin pedalear. Subo el primer remonte, el segundo, hasta los 2700m, y nos hemos ahorrado unos 600 m de desnivel…para otra constante del Iron…en el perfil se ve una bajada limpia y clara, y en realidad empieza con una pista que da miedo por la pendiente para abajo; ya tengo experiencia en quedarme sin frenos, por lo que trato de mimarlos y no calentarlos demasiado, aún así las pastillas chillan como locas, mientras trato de no perder trazada, mas cuesta abajo y más senderos. La “suave bajada” enlaza con toboganes tipo montaña rusa…y aun hay que bajar mucho hasta llegar al avituallamiento antes de la Gran subida, donde empieza la segunda especial.
La mala gana se me quito cuando tropecé con el avituallamiento previo a la especial del Chaberton Los avituallamientos son geniales: pan blanco con Nutella y mermelada, formaggio, salami, algún dulce, puré de verduras, agua, cola, polvos isotónicos y tea en garrafas…(para el año que viene quiero café¡¡¡), revueltos de huevos con tomate, compotas, tartas típicas, etc... vamos de lujo, y más con la simpatía que te lo muestran la gente de la organización que ya casi son como de mi familia, cuando paro en un avituallamiento incluso ya saben que es lo que quiero beber, te por un tubo.
Y con los superánimos de Loreto comencé la dura subida al Chaberton de 3110 y con un desnivel de casi 2000 metros.
La madre de todas las subidas del Iron, el adorado y fotografiado Monte Chaberton, no solo por su dureza; sus 3100 metros y el estar en la penúltima etapa, parece la antesala a finalizar la carrera con éxito.
El Chaberton es una mole de 3100 m. donde los italianos desplegaron a principios de siglo unas impresionantes torres, ubicando cañones para proteger el paso desde Francia. Subiendo hacia la cima y después de medio ver lo que había arriba se me antoja lo duro que fue subir todo el armamento, todo el material, con tal de preservar la frontera… Paradojas de la historia, Francia compró la montaña a los italianos después de la II Guerra Mundial.
Empiezo la subida con todos los dispositivos de ahorro activados, ritmo constante, buscando la sombra, bebiendo, comiendo; empieza por camino asfaltado, pasas por algún grupo de casas de postal, llegas a pista de tierra, cada vez menos sombra, menos casas, paro en un torrente a refrescarme, ya no hay vegetación, la pista se rompe y cuesta pedalear, se estrecha, ya no subiría un coche…ya no subiría un todoterreno…pie a tierra, que ya no subo…por suerte la bici de Lore pesa poquísimo.
Me pasan los primeros, pedaleando donde a los mortales nos parece imposible…el bueno de Milton nos contaría por la noche su secreto de tracción…Vaya crack¡¡¡ Del sol abrasador se pasa a estar encapotado en 15 minutos y ya a unos 2800 m. nos cae una tormenta interesante, con viento, frío…por la cual cortan la subida, solo hemos pasado los 30 primeros. Vemos como los primeros ya bajan, por el mismo sendero por el que subes…llego al fin arriba, ha vuelto a salir el sol…veo las torres desde arriba ¡¡¡Impresionante las vistas, la sensación de haber subido, la cara de sufrimiento y satisfacción de la gente…En total he pasado unas 2 horas pedaleando y 1.5 horas pateando y con la bici a cuestas, aparte del resto de la etapa.
Emotiva la subida y el estar tan alto, pero miras el reloj…”tempo Max 10.30 h.” Modo sprint en marcha¡¡¡. A partir de aquí me aprieto el culo y los dientes y tiro sin pausa, el tiempo lo llevo justo. Bajo por el sendero, ciclable, y llego a un punto donde a los que suben, ya no les dejan coronar, miedo a otra tempestad, dicen. En ese punto nos indican bajar hacia otra ladera, un verdadero barranco donde no han puesto ni cintas, por que la moto de trial no paso, imaginaros, sabes que es la ruta correcta porque al fondo, a lo lejos, ves unas cintas azules…y el todo terreno-ambulancia.
Bajo cómodo, luego pista rápida, mala señalización y un barranco encajonado espectacular, pasando por pasarelas de madera, con pasos realmente peligrosos, no hay señales, nadie de la organización, muy mal de tiempo, blasfemando todos, cada uno en su idioma…acabamos la bajada, otro pequeño remonte y remando y penando hasta Sestriere, el tiempo se agota. Un último remonte en el me subo casi encima de la bici en el telesilla dándole un hasta luego llevo prisa a Lore que me esperaba en el avituallamiento en el que ni siquiera me pare a por un tecesillo
En el perfil se ve como los últimos 2 o 3 km son en leve descenso, perfecto…llego a la meta de Sestriere un poco agobiado pero dentro de tiempo he tardado 10 horas, pero me dicen, tranquilo, la segunda especial la han anulado, por lo que todo el mundo esta “in tempo”, otro chasco, y yo dejándome la piel.
El Chaberton era mi meta personal, si llegaba a el ya estaba todo hecho ya que tras el mítico puerto lo que quedaba era fácil comparativamente, a pesar de lo agotado que estaba.
Durante la bajada del Chaberton Javi del equipo Buff, se pego una volada increíble clavándose el plato en la pierna y abriéndose una gran brecha, lo acompaño hasta la ambulancia más cercana y le acerque algo de comer, aquí las caídas son parte del día a día y yo casi me siento como un niño ya que tras cada caída me levantaba rápido y seguía como si nada, ya al final de la prueba note que me dolía por ello todo el cuerpo, pero mientras lo hacía estaba anestesiado.
En la llegada a meta los mecánicos me dan un gran vaso de cerveza que me sentó genial, esto si que es hidratarse.
ETAPA 7º
SESTRIERE – SAUCE
67Km Desnivel: 2800 m Tiempo: 5:30h Posición: 20
Dos cosas me alegraban y me animaban, era la última etapa y era la más corta y sencilla. Por ello decidí probar la bici de mi amigo Dani que se retiró en la mina por caída y darle un descaso a la bici de Lore que se había portado incluso mejor que la mía. Con la ilusión de probar por primera vez una 29 comencé la etapa con una especial, un descenso de vértigo y yo con una bici desconocida y así lo pague, bajé muy mal con algunas caídas incluidas.
De esta etapa lo único que recuerdo eran las ansias de llegar y la seguridad de que lo haría sin importarme demasiado si había que subir más o menos.
Tras perderme en un punto junto con más gente me uno a un grupo formado por italianos y españoles y llegamos juntos a meta tras una dura subida de asfalto con una inclinación que te obligaba a zigzaguear, pero ya nada dolía.
Y por fin la ansiada meta final, la gente animándote y uno de los organizadores de spiker, cruzo con una gran sonrisa de felicidad y cuando el organizador me va a entrevistar solo me sale “dame un abrazo coño”, nos abrazamos y después a buscar a Loreto que me espera para abrazarme también, menuda ayuda ha sido, y lo primero que le digo es “el próximo año yo seré tú asistencia”.
Ha sido una experiencia inolvidable que me ha hecho ver la bici de montaña de otra forma y romper muchas de sus limitaciones.
Tras 670 Km y más de 30000 metros de desnivel acabé en un fantástico puesto 16 de la general y con la satisfacción de terminar todas las etapas dentro del tiempo máximo original y con una experiencia brutal y un montón de momentos de felicidad y de ampliar mis propios límites.
Ya soy un Ironbiker!!!.
David García Galván
Septiembre de 2012
Comentarios
Ironbike
Fantástico relato y maravillosa la experiencia.
Muchas felicidades y gracias por compartir con todos nosotros esta aventura.
Un saludo!.
IRONBIKE
Enhorabuena por la fantastica experiencia y por el buen papel realizado, espero verlos en alguna salida para que nos cuenten mas detalles de la prueba.
Gracias por compartirlo con nosotros.
Hasta pronto.