Hace cosa de 5 días estaba realizando una ruta de 800km por tierras peninsulares, y ahora me encuentro en un barco hacia La Palma  para correr en  La TransVulcania Bike. Es mi primer año y no se lo que me espera, pero voy con mucha ilusión, me han hablado muy bien de esta carrera y de la organización (La misma que hace La TransVulcania).

 Me acompañan Sebastián, Fernando y Diego, amigos y compañeros de club.

En la mañana del sábado, en El Hoyo del Rehielo (Municipio de Breña Baja), se dan las dos salidas, la etapa reina con 70 km donde corre nuestro compañero Diego, es la primera en salir, sobre las once de la mañana da comienzo la  nuestra, 30km.

Allí estábamos, ambiente mtb puro y duro, un día para disfrutar junto a unos 100 corredores que tampoco quisieron perderse esta carrera. Horas antes Sebastián, Fernando y yo  habíamos planteado llegar a meta los tres juntos. Bajo el arco de salida esperábamos ansiosos  el pistoletazo de salida…3.2.1 allá que vamos. Salimos e intentamos no perdemos de vista, tras la masiva salida vamos buscando nuestras posiciones, en una ligera ascensión entre pinar y pistas anchas, las posiciones entre corredores se van alternando, ahora me adelantas tu, ahora yo. Todos sabíamos que en un corto plazo de tiempo empezaría una bajada larga y queríamos estar bien posicionados.

Sebastián que llevaba puesto el perfil en su gps, nos avisa, ¡¡chicos todo pa bajo!! En ese momento entra Fernado primero, luego Sebastián y yo el tercero, pronto supimos que no seria fácil , una gran polvareda, piedras sueltas y dificultad en meter rueda en las trazadas que queríamos, nos haría tomar muchas precauciones.

En una gran nube de polvo perdí de vista a los chicos, así que me limite a rodar, sinceramente no iba cómodo,( tras una semana con una bici rígida completa y con alforjas, notaba que ahora con la doble, que me costaba mucho mas bajar, se me iba para todos lados sin control). No me quedaba otra que esperar a las subidas, y así fue como pude alcanzar a los chicos, antes del primer avituallamiento, justo en el asfalto los pude ver, poco a poco logre llegar asta ellos. Tras unos momentos juntos y sabiendo que volvería la bajada me lance hacia delante.

Ahora si disfrutaba, parecía que ya tenía domada  la NINER, el recorrido fue constante, senderos estrechos, piedras y saltos, la gente en esas zonas te animaban y realmente hacia que no te pensaras si podías pasar montado o no, la adrenalina subía y te lanzabas.

A menos de 5km, aminore el ritmo, pensaba que los chicos me alcanzarían antes, pronto logre ver a Sebastián que venia siempre como fiel escudero con Fernando. Ya estábamos los tres juntos de nuevo, menudas risas, senderito para acá, otro para allá y una subidita a meta que nos saco el  hígado. Pero lo mas bonito fue entrar los tres juntos a meta, nuestras caras lo dicen todo,luego la llegada de nuestro compañero Diego remató la fantástica carrera.

Logramos un primer puesto de Fernando en m50, Diego con un cuarto puesto en la etapa reina de su categoria M30, Sebastian y yo 12 y 13 de nuestra categoria M40.

La recomiendo para el 2019, una cita que no te puedes perder.